Capitulo #19

Pronto fuimos a  un retiro con el Maharashi Mahesh Yogi, en el cual John escribió Across the Universe. Estaba John y esa hermosa puesta de sol. Tomé su guitarra, y recordé una canción que el había estado componiendo anteriormente pero no la había acabado. –All my Little boys and girls…- canté tocando la guitarra y John se acercó a mi y me quitó su guitarra para después abrazarme. John me recostó en aquella cama y nos quedamos dormidos. John y yo tuvimos una discusión fuerte, y de ahí fue donde conocí a Lulú, ella me aventó y se puso enfrente de John tomandolo por su camisón de manta, yo me asuste; pero mas tarde Lulú me dijo que personas como esas, no valía la pena enfrentar. Pasaron algunos días, y nos teníamos que regresar a Londres. Cuando llegamos recibimos la noticia de que Brian Epstein había muerto.

Todo pasó demasiado rápido, yo estaba harta de “John y Yoko” y mi hermana y su novio Edward me llevaron de viaje a España, junto con mis dos hijos. Fue un despeje Lennonistico, ESTABA HARTA DE SU ACTITUD CRUEL. También se colaron la hermana de Pattie y otro chico. Cuando llegamos a casa, yo entré corriendo.

–John-, yo grite esperando a que John respondiera, pero parecía como si no hubiera nadie, aunque estaba segura que la casa no estaba sola. Dejamos los equipajes en la sala y entré a la cocina. No podía creerlo. YOKO ONO  CON MI BATA DE DORMIR. Esto ya iba para largo, yo me enojé y entré a la cocina agarrando el cabello de Yoko y estirándolo. –John es mi esposo, NO TE METAS CON MI AMOR ESTUPIDA.-

{regresando a 1970}Solo ví como una luz hacía que impidiera abrir los ojos, y cuando lo hize, pude observar que estaba recostada en mi cama y un dolor atormentaba mi cabeza. Toqué mi frente y había una bola que me dolía, realmente John había ido a visitarme anoche y realmente me había caído y golpeado mi cabeza con ese maldito mueble estupido. Con esfuerzos me intenté levantar, pero una presión en mi cintura me lo impidió.

-¿Qué ESTAS HACIENDO AQUÍ WINSTON?- grité horrorizada al ver a John dormido en mi costado. Traía puesta aquella pijama que le había comprado en New York ya hace unos 5 años, estaba ahí dormido abrazandome. -¿Qué rayos?- dijo levantando su cabeza y frotando sus ojos, yo me alejé de el un poco y tomé un cepillo de cabello que estaba en mi buró. –¿Que rayos haces aquí John?- dije amenazándolo con el cepillo. –Ah cuidado, tiene un cepillo en sus manos, no me valla a cortar una mano-. El rió y se acercó a mí, yo también me acerque poco a poco a el, pero esas malditas sabanas me hicieron resbalarme. Caí de la cama haciendo que la madera crujiera de manera chistosa. –AH! Mi frente- grité quejándome de dolor mientras que John soltaba una carcajada y se volvía a echar a la cama. –¿De que te ries idiota?- dije subiéndome a la cama y golpeando su estomago. El se echó a reir y me abrazó. –Me tengo que ir con Yoko a New York, lo siento Carolyn- eso me hizo sentir un dolor en mi pecho, creí que me amaba, pero no era la verdad yo sola me estaba engañando. Comencé a llorar y abracé mi almohada fuertemente para después aventarla y levantarme de la cama. –¿Por qué me haces esto John?, solo contigo puedo ser feliz ¿sabías?, el mundo se convirtió en un infierno en el momento en el que pusiste un pie fuera de esta casa. Eres la razón por la cual vivo.- John sonrió y acarició mi rostro.